En una fecha como hoy, pero de 1876, en el contexto de la rebelión de Tuxtepec, el general José María Iglesias mandó a Texmelucan a Jesús Silva para exigir que los comerciantes, hacendados y feligreses de la parroquia de San Martín Obispo le proporcionaran 500 pesos para sostener la guerra.
El ayuntamiento integró una comisión colectora, que además de entregar la cooperación, expusieron en una misiva su repulsión por el acto de soborno.
En 1921, ante el Consejo Municipal Provisional de Texmelucan, los representantes agrarios del pueblo de San Lucas Atoyatenco, Lorenzo Mesa y Pedro Romero, pactaron con el administrador de la hacienda de San Damián, Honorato Mier, la recolección de las siembras en terrenos de la dotación provisional, sin confundirlas en las parcelas que se tenían a medias, evitando la vivencia, por estar los trigos en riesgo de perderse.
Este mismo día, el Partido Nacional Agrarista, mediante oficio, informó a los pueblos del distrito de Huejotzingo los acuerdos obtenidos con la Comisión Nacional Agraria, como el reconocimiento a las posesiones provisionales y que en lo sucesivo, los labradores y campesinos que tuvieran el carácter de medieros, arrendatarios o aparceros, cesaban la obligación de tributar a las haciendas afectadas parte de sus productos.
En 1933, el Ayuntamiento de Texmelucan, mediante oficio, instaba al gobierno del Estado de Puebla, resolver la petición de los habitantes de San Simón Atzitzintla, que querían pertenecer al municipio de Texmelucan, dejando a San Salvador el Verde y negándose a pertenecer al nuevo de San Felipe Teotlalcingo.