Hoy resulta que uno de los políticos más emblemáticos del antiguo régimen se ampara, buscando la protección de la justicia federal: M. Fabio Beltrones, quien quizá sea el mexicano que más sabe del asesinato de Luis Donald o Colosio, el malogrado candidato del PRI a la presidencia de México.
Es parte de los efectos del juicio llevado a cabo en los E.U. al Chapo Guzmán: la detención de Genaro Garcia Luna; el silencio casi sepulcral del boquiflojo Vicente Fox, las precavidas declaraciones de Felipe Calderón…
Los gringos no juzgaron al Chapo. Juzgaron al sistema político mexicano en su conjunto.
¿Cuántos ahora respetados que no respetables políticos mexicanos, estáran temblando?
Carlos Paz.